La señalización de seguridad y salud en el trabajo debe transmitir el mensaje del lugar de trabajo de forma clara y comprensible para todos los que se encuentren en él.  La señalización debe estar codificada por colores para indicar la gravedad del peligro, y debe ser fácil de detectar desde el entorno. La serie de normas ANSI/NEMA Z535 establece los requisitos para el diseño, la aplicación y el uso de dicha señalización.  Además, estas normas dictan la codificación por colores, estableciendo que el amarillo se utiliza para los peligros menores, el naranja para los más graves y el rojo para los peores peligros. Las señales de la OSHA pueden clasificarse en tres categorías principales. Las señales de peligro de seguridad general comparten información sobre primeros auxilios, equipo médico, saneamiento y otros aspectos de un lugar de trabajo.  Estas señales también pueden utilizarse para marcar las salidas de emergencia y las estaciones de lavado de ojos.  Las señales de seguridad generales son las que se utilizan para transmitir mensajes generales sobre la seguridad de un lugar de trabajo, sin comunicar peligros específicos.  Algunas de estas señales contienen símbolos e imágenes que ayudan a atraer la atención y a recordar a los trabajadores que deben tomar las precauciones adecuadas. Por ejemplo, un símbolo de seguridad de la OSHA debe ser visible y fácil de identificar. Un símbolo de seguridad es una buena manera de transmitir un mensaje sin tener que escribirlo. Es importante elegir un símbolo apropiado para cada situación y mantenerlo coherente en toda la señalización. Además, los símbolos deben ser legibles y fáciles de entender.  También es importante evitar el uso de imágenes que puedan desviar el mensaje principal. Esto es especialmente cierto en los casos en los que no se dispone de traducciones a otros idiomas.

Seguridad y salud en el trabajo

La creación de un entorno de trabajo seguro requiere el compromiso y la planificación por parte del empresario. Debe ser una prioridad absoluta, y el empresario debe destinar los recursos necesarios para garantizar la salud de los empleados.  Además, los empresarios deben hacer de la salud y la seguridad una parte integral de la descripción del trabajo, implicando a los trabajadores en los debates sobre seguridad y aplicando las políticas adecuadas. Es esencial que los empresarios comprendan cómo la salud de los empleados afecta a los resultados. Al fin y al cabo, los empleados con problemas de salud física o mental son menos productivos en el trabajo. La Organización Internacional del Trabajo (OIT) comenzó a celebrar el Día Mundial de la Seguridad y la Salud en el Trabajo en 2003. El objetivo de este evento mundial es aumentar la concienciación sobre la salud y la seguridad en el lugar de trabajo, al tiempo que se promueve la prevención de enfermedades y accidentes relacionados con el trabajo.  La OIT también trabaja para aumentar la concienciación internacional sobre la seguridad y la salud en el trabajo para garantizar que los trabajadores estén seguros en el trabajo. La OIT es una poderosa defensora de la salud en el lugar de trabajo, y apoya una serie de medidas para mejorarla. La OSHA también cuenta con un Programa de Alianzas, que permite a los grupos asociarse con la agencia para desarrollar herramientas de ayuda al cumplimiento. A través de este programa, los empresarios pueden educar a sus trabajadores sobre sus derechos, mientras que los trabajadores pueden aprovechar estos recursos.  Otro programa de asociación es el Programa de Asociación Estratégica. A través de este programa, las empresas pueden centrarse en un área geográfica o un peligro específico, y los resultados se comunicarán en un plazo de seis meses. 

Aplicación de medidas de seguridad en el trabajo

En 2013, más de 600 muertes relacionadas con el trabajo se atribuyeron a la maquinaria en Estados Unidos.  Los riesgos que plantea la maquinaria pueden incluir resbalones, caídas o lesiones sufridas durante la manipulación manual repetitiva. Otro tipo de riesgo común son los espacios confinados.  Estos espacios tienen un acceso limitado, poca ventilación natural y no están pensados para que los empleados los ocupen de forma continua. Los riesgos laborales, como las caídas, pueden afectar tanto a los trabajadores como a quienes intentan rescatarlos. Este tipo de espacios requiere la aplicación de medidas de seguridad laboral para minimizar el riesgo. Aunque la ley impone a los empresarios la obligación de proporcionar un entorno de trabajo seguro, muchos de ellos deciden ignorar sus obligaciones legales.  Además, los empleados suelen desconocer sus derechos y no denuncian las violaciones de la seguridad laboral.  La seguridad en el lugar de trabajo incluye el uso de equipos de protección adecuados. Esto incluye ropa de trabajo industrial ignífuga, equipos reflectantes y calzado antideslizante.  Mantener el espacio de trabajo limpio es una parte clave para mejorar la satisfacción laboral y prevenir accidentes. La seguridad es también un componente crucial de las relaciones con los clientes. Cuando los trabajadores no están formados, pueden estar expuestos a productos químicos o materiales nocivos. Manteniendo un espacio de trabajo limpio, se garantiza que los clientes no tengan ningún problema.