La seguridad para el almacenamiento de productos químicos es esencial para un lugar de trabajo seguro, y existe una norma para almacenar los productos químicos. Sin embargo, las diferentes sustancias químicas plantean diferentes peligros. A la hora de determinar la zona de almacenamiento adecuada para un producto químico, hay que tener en cuenta sus características de inflamabilidad y corrosividad. Es por eso que entra en juego la norma para almacenar productos químicos. Por ejemplo, no se recomienda almacenar oxidantes cerca de materiales inflamables y agua. Además, los productos químicos propensos a las explosiones deben almacenarse en un armario cerrado. Mantener los productos químicos en un almacenamiento adecuado es vital para prevenir accidentes. Por ejemplo, el almacenamiento de productos químicos a la luz directa del sol puede provocar un incendio. Independientemente del método de almacenamiento, los productos químicos nunca deben almacenarse cerca de fuentes de calor o a la luz directa del sol.  También deben fecharse cuando se abren y se reciben. La hoja de datos de seguridad debe consultarse con la mayor frecuencia posible y siempre que surja alguna duda. Al igual que con todos los materiales peligrosos, el uso y almacenamiento adecuados de los armarios de almacenamiento son esenciales para prevenir los peligros y mantener la seguridad de los trabajadores. El espacio de almacenamiento de los productos químicos debe estar claramente etiquetado y ser fácilmente accesible. Si no es así, los productos químicos deben devolverse a su espacio de almacenamiento designado después de su uso.  Si un recipiente tiene una etiqueta, lo mejor es girarla para que sea fácil de leer. Si la etiqueta no tiene una identificación clara, es mejor evitarla por completo. Un sistema de contención secundario es importante para garantizar que los productos químicos líquidos no se filtren ni fluyan.

Norma para almacenar productos químicos en España

El Consejo de Ministros español ha aprobado la nueva norma para almacenar productos químicos. Es la primera vez que se aplica la nueva normativa, que pretende reducir los riesgos de accidentes e incendios que pueden producirse al almacenar productos químicos.  Según las últimas estadísticas, en España se producen unos ocho incendios diarios en las naves industriales. Estos incendios podrían evitarse con la aplicación de las nuevas normas. Además, el noventa por ciento de las industrias en España utilizan materiales peligrosos, que pueden causar graves problemas. Esta nueva norma fue introducida por el Real Decreto 379/2001, que establece una serie de normas de seguridad para el almacenamiento de productos químicos.  Entre otras cosas, establece el diseño de las instalaciones, las distancias entre equipos e instalaciones y el sistema de protección contra incendios. Además, especifica el proyecto técnico que debe realizarse antes de legalizar una nueva instalación, y también exige inspecciones de control. Antes de que una nueva instalación de almacenamiento pueda ser registrada legalmente en España, debe ser certificada por una autoridad certificadora externa. La ITC debe ser verificada por un organismo de inspección independiente y declarar que las medidas son equivalentes o superiores a las existentes.  Es importante tener en cuenta que, una vez legalizada la instalación, debe ser inspeccionada cada seis meses. Hay algunas excepciones a esta regla, pero aun así es conveniente seguir las normas.